DTT es una herramienta de autoevaluación, es decir, el propio usuario es el que se pone a prueba y es el único implicado en el proceso. Nadie más interviene ni recibe información alguna.
Para cada dominio competencial en su conjunto, DTT evalúa los tres elementos de competencia de manera independiente y diferente:
Los conocimientos los mide de manera objetiva a través de preguntas tipo test con 5 opciones de respuesta, de las cuales, sólo una es correcta.
Las habilidades y actitudes, al ser elementos relacionados con la práctica y sólo objetivables a través de la observación, son evaluadas en DTT mediante test de forma subjetiva. Se presenta para ello una situación laboral concreta y se ofrecen al evaluado diferentes opciones de desempeño ante ella. El usuario ha de escoger con honestidad, cuál de las alternativas refleja mejor su manera habitual de proceder. En estos casos no hay respuestas correctas o incorrectas.
La honestidad de respuesta por parte del interesado es crítica para obtener una información válida y veraz respecto a su nivel competencial real en relación con habilidades y actitudes. El objetivo de DTT es ayudar a identificar áreas de mejora en el perfil profesional del evaluado y esto sólo es posible afrontando la prueba con absoluta sinceridad.

DTT aporta información a dos niveles.
En primer lugar, al finalizar la prueba, el evaluado recibe de manera automática un informe descargable, personalizado y confidencial, en el que figura el nivel de capacitación alcanzado en cada uno de los dominios, y donde se identifican puntos fuertes y áreas de mejora de los diferentes elementos que configuran el perfil competencial. De esta manera se puede planificar su formación a medida, incidiendo prioritariamente en aquellos ámbitos que necesitan ser reforzados.
En segundo plano, los datos de todas las autoevaluaciones realizadas son también analizados de forma agregada y disociada por la Sociedad Científica contratante de DTT, con el fin de identificar tendencias globales de su colectivo de socios, pudiendo tomar así decisiones estratégicas de formación basadas en datos de necesidades objetivas.

La puesta en servicio de DTT implica la realización de varios pasos previos, todos ellos esenciales para su validez como herramienta de autoevaluación de competencias.
En primer lugar, DTT parte de la elaboración de un mapa de competencias hecho a la medida del colectivo al que se ofrece la herramienta. Un grupo de expertos en ese ámbito de actividad, conducidos por técnicos de Luzán5 a través de una metodología ampliamente contrastada, son los responsables de la identificación por este orden de: dominios competenciales, competencias y elementos de competencia (conocimientos, habilidades y actitudes)
En segundo lugar, el mismo grupo de expertos, guiados igualmente por una metodología específica liderada por Luzán5, son los encargados de redactar el banco de preguntas para la autoevaluación de esas competencias identificadas.
Por último, la validez, fiabilidad y garantía estadística de la prueba de evaluación creada y de la propia herramienta DTT, son certificadas por el Instituto de Ingeniería del Conocimiento (IIC), una entidad externa a Luzán5 especializada desde hace décadas en la evaluación de competencias profesionales en múltiples ámbitos de actividad.